Ha llegado el turno de continuar con el casco medieval comenzado en este artículo. Mientras consigo el cuero para colocar en los laterales del spangenhelm, he realizado la fundición de bronce para las piezas del mismo. En particular para el protector nasal, una banda lateral de refuerzo y la cimera. Una de las ventajas de colocarle bronce en estas piezas es que le agrega bastante resistencia al casco además de ser bastantes vistoso por el contraste de colores y materiales.
Supongo que con el simple agregado de la cimera la resistencia del yelmo a un golpe en la parte superior debe ser bastante superior a que si no la tuviese.
También hay que aclarar que el peso del conjunto se incrementará bastante dado que las tres piezas antedichas poseen un grosor de aproximadamente 8 milímetros.
Decidí hacerle las tres piezas a partir de las sugerencias hechas en la entrada anterior en la sección de comentarios.
En este caso empleé la técnica que hace uso del poliestireno expandido. Para ello, se han de confeccionar las piezas en dicho material lo más trabajadas posible para ahorrar bronce y para también ahorrar tiempo de mecanizado posterior sobre la parte terminada.