La imagen parece mostrar un rostro enorme y aterrador que emerge súbitamente del océano.
Pero lo que realmente estás observando es un pez mirador que se ha enterrado en el suelo arenoso del Mediterráneo.
La foto fue tomada por Pietro Formis de Italia y está entre varias altamente elogiadas en el Concurso de Fotógrafo de Vida Silvestre del Año de este año.
El Sr. Formis explicó que normalmente no participa en concursos fotográficos. Envió esta imagen porque "le gustó mucho", pero no esperaba recibir ninguna mención.
"Estoy súper feliz y estoy contando los días para la ceremonia. Creo que veré a la mayoría de mis, diré colegas, pero son mis héroes y lo mejor de la fotografía, así que no puedo describir lo feliz que estoy", dijo el Sr. Formis.
Los ganadores generales del Concurso de Fotógrafo de Vida Silvestre del Año se anunciarán en una ceremonia de premiación el 10 de octubre. La exposición anual del Museo de Historia Natural, que muestra 100 fotografías seleccionadas entre las miles que participaron en el concurso, abrirá el viernes siguiente, el 13 de octubre, y luego, como es habitual, emprenderá un recorrido por el mundo.
Desplázate por esta página, podrás disfrutar de algunas de las otras imágenes altamente elogiadas en lo que es el 59º año del concurso.
El pez mirador atlántico, cuyo nombre latino es Uranoscopus scaber, recibe su nombre porque sus ojos sobresalen hacia arriba. También son depredadores y, para atrapar a sus presas, se esconden bajo la arena, dejando solo sus ojos y boca visibles, eso es lo que puedes ver en la foto del Sr. Formis.
"Para mí parece una máscara vudú o un rostro humano y esas son las especies que más me gustan, las especies que tienen un rostro similar al humano, con grandes ojos y una gran boca. Es un animal hermoso", dijo el Sr. Formis.
El Sr. Formis explicó que al utilizar luz concentrada de un flash, una velocidad de obturación lenta y movimientos deliberados, logró fotografiar al pez mirador casi iluminado en el agua azul cristalina.
"Para mí es como una cascada y luego desde atrás ves este rostro aterrador. Tomé algunas imágenes diferentes, pero esta es la que prefiero", dijo.
La fotografía submarina se ha convertido casi en una "obsesión" para el Sr. Formis desde que su padre, también fotógrafo, lo llevó a bucear y cambió su vida.
"Ir al agua y tomar fotos de toda esa belleza, es algo que me siento privilegiado de hacer", dijo.
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